Gertz, “El gran tramposo”
Por Mario A. Medina
¿Es un “despropósito e inconcebible” la acusación de asociación delictuosa contra integrantes de la comunidad académica por parte de la Fiscalía General de la República (FGR) en contra de un grupo de académicos, por un supuesto desvío de recursos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) como afirmó el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue y muchos otros personajes? Pareciera que sí.
El titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero está obligado a demostrar fehacientemente que las acusaciones que ha hecho contra 31 científicos y académicos están sustentadas con información comprobada y comprobable, y que detrás no hay ninguna motivación política, trampa leguleya o cualquier otra que no tenga que ver con el cumplimiento de la ley.
Huele mal por principio el delito que se les imputa: “Delincuencia organizada”. Son acusaciones fuera de cualquier proporción. Pero también creo, no es desproporcionado, que las universidades y todo tipo de instituciones que trabajan con dineros públicos sean auditadas, que cada peso que se les entrega sea bien utilizadoy para los propósitos que fueron etiquetados.
En estos días hemos escuchado reacciones que lamentan, se asegure, pudiera haber actos de corrupción. Casi, casi afirman que es “imposible” que eso pueda suceder. Tan puede suceder que el mejor ejemplo de las transas de rectores y funcionarios de ocho universidades públicas que desviaron recursos públicos millonarios, es la llamada Estafa Maestra; estafa que cometieron personajes que se les calificaba de “intachables”, que era posible meter las manos al fuego por ellos. Lástima, decepcionaron.
Efectivamente como ha señalado la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum se debe investigar si hubo mal uso de los recursos, y si así es, es desproporcionada la acusación al equiparar el posible delito como delincuencia organizada. No tiene nada que ver.
Ricardo Monreal, el Coordinador parlamentario de Morena en el Senado, se ha pronunciado por no investigar a las universidades en el entendido de que se violaría la autonomía. El mismo Santiago, Nieto Castillo, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), señaló que esa Unidad no fue creada para investigar instituciones académicas.
En última instancia, por ley, le corresponde esa tarea al Conacyt que dirige María Elena Álvarez-Buylla a quien se le señala de ser aliada de Gertz, y quien por cierto aseguró desconocer la acusación de la FGR en contra de 31 científicos y ex funcionarios del Foro Consultivo Científico y Tecnológico de la institución, quienes también han sidoimputados por lavado de dinero, uso ilícito de atribuciones y peculado.
El asunto no es menor por lo que podría acarrear este problema que movilizaría a sectores muy particulares de la sociedad que incluso han simpatizado con la lucha del dirigente social y político, Andrés Manuel López, incluso votaron por él, pero que hoy disienten con el Presidente de la República y lamentan que este asunto esté siendo usado por Gertz Manero como una venganza política en contra de quienes, en el 2010, le negaron su ingreso al Sistema Nacional de Investigadores (SIN) del Conacyt por una “insuficiente producción científica” y “no demostró una productividad para la generación y transmisión de nuevos conocimientos”, como lo establecía el reglamento.
El Fiscal General de la República, emprendió un litigio en tribunales federales en los años siguientes frente a tal decisión. Sin embargo, el Consejo confirmó la negativa en cuatro ocasiones más, pero finalmente el funcionario logró que se le nombrara “investigador nivel III” en abril pasado. Esto, bajo la dirección del Conacyt de Elena Álvarez-Buylla.
El ingreso al SNI debe ser calificado por científicos más destacados del país a partir de un reglamento, una comisión de 15 investigadores en cada materia, pero el abogado Gertz, ingresó al Sistema, se ha acusado, gracias a una interpretación jurídica “exprofeso”, es decir, fue creada por una comisión con tres miembros únicamente para “para favorecerlo”.
Tras agotar su queja (abril 2015) en tribunales, la resolución le favoreció a penas en agosto de 2020, pero el Consejo Nacional para la Prevención de la Discriminación (Conapred) llegó a la conclusión de que hubo “un trato diferenciado” hacia Gertz, por lo que ordenó (resolución 01/2020) una “reparación del daño”, que consistió en que el Conacyt evaluara por quinta vez los méritos del fiscal para su ingreso al SIN, según información obtenida por el portal Animal Político.
Sobre Gertz Manero recaen un sin número de acusaciones en su contra. Tiene litigios de carácter familiar. Uno de ellos fue en contra de la familia de su hermano quien ya había fallecido. Poco se sabe de cómo echó a los dueños de la tienda de ropa femenina “Líneas”, que le suplicaban les siguiera rentando algunos pisos y la tienda en la calle de Palma en el Centro de la CDMX.
Ha sido un personaje peculiar. Lo mismo fue cardenista quefoxista. Secretario de seguridad pública con cada uno en la Ciudad de México y a nivel federal. Ha sido cercano al partido Convergencia -hoy Movimiento Cudadano- comodiputado federal, seguidor de Morena.
Quienes forman parte del SNI para poder acceder a las becas que se les entregan mes a mes, deben realizar un sin número de investigaciones, publicar libros, presentar trabajos académicos entre otras muchas realizaciones, pero siempre haciendo aportaciones inéditas. Lamentablemente a GertzManero, igual que al expresidente Enrique Peña Nieto, a quien se le cachó birlándose parte de su tesis de licenciatura,al Fiscal General de la República, el investigador Guillermo Sheridan en un artículo en El Universal publicó cómo encontró las “pillerías” de Gertz, por lo que lo acusó de plagiario.
Sheridan se dio a la tarea de revisar párrafo por párrafo de uno de los libros que Gertz `presumía como suyo. “Para conocer la ´obra notable´ de mi nuevo colega en el SNI, me hice de uno de sus libros como ´autor único´: Guillermo Prieto (Biografía), publicado por la Secretaría de Educación Pública en 1967. Pues me temo que Gertz no es su “autor único” en tanto que usurpó al verdadero, Salvador Ortiz Vidales, cuyo Guillermo Prieto y su época fue publicado por la Editorial Botas en 1939”. El también periodista encontró enormes similitudes que, al leer uno y otro párrafo, llegó a la conclusión que Gertz es un fullero.
En las malas cartas de Gertz se puede leer un montón de calificativos que van desde un “excelente” abogado hasta, al menos, el más suavecito: “el gran tramposo”.
El asunto no es menor, pues pareciera que la PGR priísta o panista no se ha ido. Sigue allí. Si no está creando culpables que lo demuestre fehacientemente. El Presidente debe estar a las vivas, no vaya a ser que se lo estén choreando con un cuento, pues el tema no sólo requiere, como afirmó el rectorGraue, que debe haber “respeto irrestricto a la defensa de los posibles involucrados”. Sí, desde luego, pero, sobre todo, debe haber respeto y cumplimiento al derecho, a la ley que tanto reclamó el líder social que después de muchos años de lucha llegó a la presidencia.
Que no le cuenten…
Hablando de tramposos, no hay día que no se conozca de un nuevo fraude. Desde los que fueron favorecidos con exención de impuestos, quienes se negaron a pagarlos, quienes se siguen negando a pagarlos, desvío de recursos y un largo, largo etcétera. Por eso se entiende la guerra de los “factores del poder”, de “chayoteros” y demás.